miércoles, 18 de diciembre de 2013

Semblanzas de los "Maestros honorarios del Teresa"


TESTIMONIOS
“Maestros honorarios del Teatro Teresa Carreño, 2012”
 SEMBLANZAS

Emperatriz Cortéz “Tía”
Vestuarista
Nació en Ciudad Bolívar.
05-10-1945

Su pasión por el hilo y la aguja, le hicieron desarrollar una profesión poco común en el medio artístico. Ser vestuarista le ha permitido vestir una gran cantidad de personalidades y artistas nacionales e internacionales en el mundo del espectáculo.

Sus inicios datan desde muy joven, cuando comenzó a incursionar en la realización de trajes para el ballet, creando y confeccionando vestuarios para artistas, tales como a los del Negro Ledesma, Carlos Orta, Alice Dotta y Hercilia López. Trabajó muchos años en el Instituto Superior Nacional de Danza y elaboró en la Escuela Municipal de Danza y Ballet de Vista Alegre (actualmente Escuela Freddy Reyna) y más tarde, en la Escuela de Chacao.

Desde el año 1992, acompañada siempre de su sobrina Fabiola Fazzino, bailarina de gran trayectoria del Ballet del Teatro Teresa Carreño, tuvo la oportunidad de realizar viajes participando en innumerables giras del Ballet Teresa Carreño, como vestuarista, apoyando siempre al coreógrafo Vicente Nebreda. De esta manera, creció entre ellos una gran amistad transformándose en una excelente relación de trabajo profesional que dio frutos a la hora de realizar trajes y vestimentas, producto de las ideas y exigencias del maestro. Durante todo este período fue encargada de cuidar, administrar y conservar en perfecto estado, todos los trajes de las diferentes coreografías del Ballet Teresa Carreño. En muchas ocasiones rehízo aquellos que se habían deteriorado o perdido por completo, reponiéndolos en forma silenciosa, demostrando de esta manera, su amor y vocación por este oficio.

Recibió el Premio Municipal como mejor Vestuario, en 1999 y en 2010, y el reconocimiento por Mérito al Trabajo en su 2da clase, en 2007. Es apasionada de la lectura y a su familia, y por su inquebrantable constancia y dedicación, se ha ganado el cariño incondicional de un gran número de bailarines y bailarinas del país, quienes la llaman cariñosamente,   ”Tía”.

Recibió el diploma de "Maestra Honoraria" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.



Eulogia Mallobre “Yaya”
Vestuarista
Nació en Maturín, Estado Monagas
11-03-1955

Desde muy pequeña se inició en el arte de la costura en un pequeño convento de monjas en el Estado Monagas, ayudando a descoser y a armar prendas de vestir, y colaborando en otros quehaceres domésticos de la institución. Más tarde, se trasladó a Caracas, donde estudió en la Academia de Arte Nereida, ubicada en el Paraíso, egresando como Modista de Alta Costura. Luego se especializó en la misma institución, como Profesora y Modelista de Alta Costura. Luego siguió sus estudios en otras áreas relacionadas, como la de Repujado en Cuero, Artesanía, Manualidades y Sastrería.

Trabajó como Modista en varias empresas caraqueñas, y en 1986 ingresó al Departamento de Sastrería del Teatro Teresa Carreño, donde desempeñó una labor consecuente y de arduo trabajo, debido a que son los años de las grandes producciones en esa institución. Se destaca en casos especiales de trajes, tal como lo fue uno confeccionado en tela de alfombra para la insigne maestra y bailarina Nina Novak, quien encarnaba la madre de Julieta, en el ballet Romeo y Julieta, con coreografía de Vicente Nebreda.


Con 26 años ininterrumpidos de labores en el Teatro Teresa Carreño, como Especialista en Vestuario, ha vestido una infinidad de artistas en las diversas producciones presentadas en el Teatro, especialmente en los personajes de ópera y ballet. Además tuvo la oportunidad de realizar un importante curso en la ciudad de Telavit, Israel, en la cual obtuvo diploma de diseño de Vestuario en el año 2000.


Recibió el diploma de "Maestra Honoraria" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Ramiro Rodrigo Rodríguez Anzardo
Atrezzista
Nació en la Habana, Cuba
13-01-1955

A los seis años de edad, sus padres lo llevaron a una presentación de la ópera La traviata. Los decorados, telones, ambientación del palacio, pintura escénica y utilería, lo impresionaron de tal forma, que a partir de ese momento, su vida se inclinó por descubrir y recrear el mundo mágico del espectáculo.

Desde esa edad desarrolló la habilidad por el dibujo y la pintura. Estudió en la Academia de Artes Plásticas entre  los siete y los once años de edad. En el año 1989, egresó del Instituto Superior de Arte de La Habana, obteniendo la especialidad en Historia del Arte y recibiendo la licenciatura como Atrezzista e Instructor de Dibujo Artístico. A lo largo de todos esos años, realizó diversas actividades en las áreas de escenografía y vestuario con la Ópera y Ballet Nacional de Cuba, con los que compartió de forma muy cercana, trabajos con la primera bailarina Alicia Alonso.

Desde 1989 se radicó en Venezuela e ingresó al Teatro Teresa Carreño como Jefe del Departamento de Utilería, el cual se encarga de ornamentar y embellecer de forma integral todas las producciones, especialmente las de ópera y ballet. Su arte lo testimonian un conjunto de elementos corpóreos y objetos seleccionados, en su gran mayoría creados y confeccionados por él mismo. Por otro lado ha asumido personajes, tales como los del sirviente en la ópera la Boheme, mayordomo en el ballet el Cascanueces (16 años haciéndolo), padre de Manuelita Saenz en el espectáculo de Diana Patricia, el payaso, como figura publicitaria y como actor en la ópera I Pagliacci, minero en Van Gogh, cura en Cavalleria Rusticana, sirviente en la Traviata, embajador de Rusia en Lago de los Cisnes, entre otras muchas caracterizaciones, actividad que lo ha involucrado íntimamente en el quehacer diario y  a la vida artística del Teatro Teresa Carreño.

Recibió el Premio Municipal honorífico a la Danza en 2011, otorgado por el Ministerio del Poder Popular de la Cultura y decenas de reconocimientos, en los que destaca el entregado por la Guardia de Honor de la Presidencia de la República. Ha trabajado como actor en diversas producciones, en la que cabe mencionar el documental, La Vida de Teresa, realizado por Cuadernos Lagoven (1993)

Realizó pasantías en el Teatro Colón de Buenos Aires, entre 2000 y 2002, así como en el teatro de la Zarzuela en Madrid, España (1999). Diseñó y realizó escenografías para los ballets, el Amor Brujo, Pasión y la recreación de Tarde en la Siesta.

Ha ofrecido importantes y consecuentes ambientaciones que han servido como preámbulo a eventos y producciones del Teatro. El mismo Rodrigo, reconoce como sus tutores, a Elías Pérez Borjas (Gerente del TTC, 1984-90) y al coreógrafo Vicente Nebreda (1984-2002). Su trayectoria profesional está impregnada de una gran vocación al servicio del arte en todas sus manifestaciones, dando vida a las ideas de los grandes diseñadores que han participado con sus trabajos en el Complejo Cultural.

Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Luisa Fermín
Productora
Nació en Ciudad Ojeda, Estado Zulia
09-02-1957

Trabajó desde muy joven en la Biblioteca Nacional, manejando el Fondo Audiovisual y fotográfico, es decir, partituras, fotos, discos, videos, entre otros renglones. En 1979,  el Dr. Salvador Itriago, la invita a trabajar en el Archivo Musical del futuro Centro Documental de la recién creada Fundación Teresa Carreño, con quien comparte una gran variedad de funciones administrativas y técnicas, dirigidas desde las improvisadas oficinas en plena construcción del Complejo Cultural Teresa Carreño. En esta etapa se realizan numerosos eventos en diversas salas y teatros del país,  tales como en el Poliedro, Teatro de la Ópera de Maracay, Teatro Municipal de Caracas, Aula Magna, y en los cuales se ofrecían espectáculos producidos por la Fundación Teatro Teresa Carreño. El ballet Giselle y la ópera Semirámide, fueron los dos primeros grandes montajes que despertaron su vocación artística y su pasión por el oficio para la producción de espectáculos.

El año 1981, es definitorio para su vida profesional, ya que durante ese año se realizaron nueve títulos de ópera en el Teatro Municipal, el cual cumplía cien años de su inauguración. Estos montajes que representaron un gran reto de trabajo, sirvieron de preparación técnica para emprender su pasantía en producción, de casi un año, en el Teatro Colón de Buenos Aires, bajo la tutela del gran técnico de escenario Alberto Alonso.

A su regreso, en 1983, año en el que se inaugura el Teatro Teresa Carreño, comienza su trabajo como Jefe de Escenario en la Sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño, siendo la primera coordinadora de escenario en Venezuela y la única, para ese entonces, que manejaba los protocolos y la logística de un escenario, aplicando sus conocimientos con un criterio profesional en esta área tan poco conocida en nuestros escenarios venezolanos. Tiempo después, realiza otras pasantías en el Teatro Lírico de la Zarzuela, en Madrid, España, para su perfeccionamiento en producción.

Luego de varios años manejando el área técnica del escenario de la Sala Ríos Reyna, es promovida como Directora de Programación del Teatro, pero sin abandonar la supervisión de las actividades de la sala, lo que la obligó a mantener una rutina de tiempo completo e  involucrándola de forma integral a todas las producciones de la Fundación. Más tarde, luego de formar un nutrido grupo de coordinadores de escenario y de crear un estilo y una pauta para dirigir las actividades técnicas en la sala, es nombrada Coordinadora General Operativa, cargo que ejerce en la actualidad.

Durante la década de los noventa, y debido a su gran experiencia en escenarios nacionales e internacionales, se desempeñó como Jefe de Giras del Ballet Teresa Carreño, dirigiendo incontables presentaciones en diversas ciudades de nuestro país y del extranjero.

Su gran tutora ha sido la destacada productora de eventos, María Gómez, quien a lo largo de muchos años y a través de una gran interacción laboral con ella, fue educada para enfrentar el complejo mundo del espectáculo. Esta experiencia, aunada al contacto directo con el personal del Teatro,  ha sido para ella su mejor escuela.

Ha recibido el reconocimiento por parte de La Casa del Artista por  las producciones de los ballets El cascanueces y La Cenicienta, también recibió la Condecoración Diego de Lozada, Orden al Mérito Francisco de Miranda y numerosos botones, diplomas y placas por 10, 20 y 30 años de servicio.

Recibió el diploma de "Maestra Honoraria" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Félix Silva “Gato”
Técnico Teatral en Realización Escenográfica
Nació en la Parroquia Santa Rosalía, Caracas.
06-03-1952

Comenzó su formación en el año 1972, en los espacios del antiguo Ateneo de Caracas, realizando diversos montajes bajo la dirección técnica de José Salas, y más tarde, bajo la tutela de Fernando Guánchez (Guarapo), escenógrafo del Grupo Teatral Rajatabla, con quien colaboró en decenas de obras teatrales. Recuerda con nostalgia  la realización de la primera obra presentada por el Grupo Rajatabla  llamada “Cacería de Ratas”  en la Sala Rajatabla y en “Fiebre”, última producción ofrecida en el antiguo Ateneo.

Creada la nueva sede del Ateneo, participa en los montajes de todos los festivales internacionales de teatro a lo largo de seis temporadas ininterrumpidas y en teatros como el Alberto Paz y Mateos, donde realiza una intensa actividad al lado de su buen compañero César Bolívar, diseñando y creando escenografías para los grupos teatrales del momento, así como la construcción de dispositivos para la presentación de eventos, bautizo de libros, conciertos, conferencias, foros, conciertos de rock, recitales, etc.

Trabajó en la ambientación escenográfica de las películas, Macho y Hembra, La Gata Borracha, La Oveja Negra, Cangrejo II y Cuchillos de Fuego.

El destacado escenógrafo José Gómez Frá, fue también un gran maestro, pues fue un constructor  de escenografías en todo el territorio nacional, creando un galpón llamado Taller de Escenografía y Reciclaje, especializado en la construcción de elementos corpóreos y escenográficos para decenas de grupos teatrales caraqueños que solicitaban este servicio, siendo esta etapa, una extraordinaria escuela de gran inventiva que le dio experticia en la manipulación de los materiales de construcción. También formó parte del grupo de trabajadores de AVEPROTE (Taller de realización, reciclaje  y depósitos de materiales escenográficos de la asociación venezolana de profesionales del teatro)

En el año 1984, el director general, Elías Pérez Borjas, lo llamó para que formar parte del personal del Teatro Teresa Carreño en el Departamento de Carpintería, comenzando a construir grandes escenografías, como las de las óperas el Cónsul, el Trovador y Barbero de Sevilla. Sus grandes compañeros en las primeras producciones fueron los carpinteros César Bolívar (el Gran Catire) y Carlos Cisneros (conocido como el Conejo) con quienes compartió muchos años en el área de realización escenográfica.

Durante los años noventa, participó como Jefe de Escenografías en varias giras internacionales, del  Ballet Teresa Carreño dirigido por el coreógrafo, Vicente Nebreda. Visitó, Cuba, Puerto Rico, Estados Unidos, España, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil, en los cuales observó una diversa dinámica teatral.


Félix Silva, cumplió más de 40 años de servicio en la institución y 30 en la creación escenográfica de todos los montajes realizados en el Complejo Cultural Teresa Carreño,  es un gran melómano de la lectura y de la música, así como también de la pintura, el dibujo y la fotografía. Actualmente produce un programa en la Radio Comunitaria Naiguatá, 89.3 FM.

Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.



Enrique Palacios
Carpintero
Nació en Caracas
09-07-1943


Desde muy joven realizó trabajos diversos, sin definir con claridad su vocación para algún trabajo en particular. Fue entonces cuando un amigo, el escenógrafo Enrique Tovar, lo invitó a trabajar en el Teatro Municipal de Caracas para el montaje de varias óperas por motivo de cumplirse 100 años de su inauguración (1981). 
Luego de esta temporada, trabajó en el antiguo Ateneo en varias producciones, entre las que destaca, Gaviota, cuyo piso consistía en un gran tejido realizado con gruesos mecates, que había que quitar y poner diariamente. Sin conocer muy bien el oficio, comenzó ayudando a la realización de pequeños elementos de utilería y a construir tarimas para el escenario. Allí conoció a la productora y jefe de escenario Luisa Fermín, quien le propone un empleo en el área de carpintería, en el Teatro Teresa Carreño.

Es así como en 1983, a un mes de inaugurarse el Complejo Cultural Teresa Carreño, ingresa al Departamento de Utilería, bajo la conducción de Xavier Coca, donde perfeccionó el arte de crear y fabricar los objetos exigidos por las producciones programadas por el Teatro. Pocos años después, es ascendido como Jefe del Departamento del Taller de Carpintería hasta el 2008, cuando es jubilado.

Trabajó en descifrar los planos y las ideas que llevaban los escenógrafos para las óperas y ballets, los cuales, en la mayoría de los casos, solo se expresaban en dibujos o bocetos hechos a mano alzada. Recuerda en particular su trabajo con el reconocido escenógrafo Eduardo Mancera, con quien trabajó duramente para la realización de la escenografía de El trovador en 1985.


Formó parte del equipo técnico en las Giras Internacionales del Ballet Teresa Carreño durante el año 1992 por los Estados Unidos, así como también en varias por el interior de Venezuela llevando espectáculos de relevancia. Enrique Palacios es un asiduo escucha de la música venezolana, del merengue y de la salsa.


Recibió el diploma de Maestro Honorario por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Carlos Alirio Uribe “Sopa”
Luminotécnico
Nació en San Antonio, Edo. Táchira
24-08-1962

De muy joven, animado por su padre, comenzó a frecuentar los escenarios preparados para las filmaciones de películas, en las que en muy poco tiempo, se incorpora como aprendiz en el área eléctrica. Su primera experiencia importante fue en el rodaje de El pez que fuma, de Román Chalbaud. Luego su tío, quien trabajaba en el Teatro Municipal de Caracas, le pidió que hiciera unas suplencias como electricista, lo que lo convirtió en pocos meses, en ayudante de iluminación, durante las temporadas de ópera producidas por la OMAC (Ópera Metropolitana de Caracas).

Paralelamente trabajó con el cineasta César Bolívar en la película Juan Topocho y en otras como La bomba, La Invasión, entre otras.  En 1979, por su habilidad en el manejo de reflectores y sobre todo, en la manipulación de los tableros y comandos de luces, es nombrado Encargado de la Consola de Iluminación del Teatro Municipal de Caracas.

En este año, el escenógrafo e iluminador Fernando Calzadilla, lo lleva al recién inaugurado, Teatro Teresa Carreño para que ejecute el cargo de Operador de la Consola de Luces, actividad que ha ejercido hasta hoy día.


El maestro José Castillo ha sido por muchos años su tutor y compañero. Con él ha compartido numerosas giras nacionales e internacionales y laboriosos trabajos. Una de las experiencias más gratificantes ha sido la realización de la iluminación de los numerosos espectáculos del Festival Internacional de Teatro que se presentaban en la sala de forma continua. Durante su larga trayectoria como encargado del área de iluminación, ha realizado numerosas producciones de diversos géneros en la Sala Ríos Reyna, haciendo paralelamente, diseños de luces para ópera, ballet, teatro y eventos variados en Caracas y en el interior del país. Ha recibido numerosos reconocimientos y halagos por su eficiente e ininterrumpido trabajo durante estos últimos años.


Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Milagros Coromoto Rodríguez
Peluquera y maquilladora
Nació en Caracas
06-10-1958

Terminando el bachillerato y luego de realizar algunos trabajos esporádicos como secretaria, un familiar le propone trabajar en una temporada de ópera en el Teatro Municipal de Caracas, en el área de vestuario con el objeto de tener en buen estado los trajes de los cantantes. A los pocos días, viendo las actividades en otros departamentos, se siente atraída especialmente por los de peluquería y maquillaje, por lo que solicita se le permita colaborar en esta área. Conoce al vestuarista y maquillador Adán Martínez Francia, quien por muchos años será su gran amigo y maestro. También conoce  a la que será su inseparable amiga de labores, Ana Kogén, con quien comparte su trabajo en el Teatro Teresa Carreño hasta hoy día.

Con la inauguración del Teatro Teresa Carreño, en 1983, Adán Martínez es nombrado Jefe de Peluquería, y de inmediato, llama a Milagros para que se incorpore al equipo del Teatro en 1983. Su primera gran experiencia es la ópera Italiana en Argel, de Giacomo Rossini, con la que aprende a realizar profesionalmente pelucas de tull, barbas y bigotes, así como confeccionar collares, adornos, tocados y pelucas de época.

Más tarde y a lo largo de su carrera como peluquera y maquilladora, vive intensas experiencias con artistas renombrados, tanto de ópera como de ballet, sin embargo, el mimo francés, Marcel Marceau, es quien deja una hermosa huella profesional en su trayectoria, cuando asume la responsabilidad de realizarle parte de la indumentaria que utilizaría el artista en sus futuras presentaciones, en especial, su clásico sombrero y varias pelucas. Óperas como Turandot, Madama Butterfly y Barbero de Sevilla, fueron, en su criterio, emblemáticas en su vida.

Por la década de los 90, realiza varias giras internacionales con el Ballet del Teatro Teresa Carreño por países como, Argentina, Puerto Rico, Cuba, Estados Unidos y Paraguay, asistiendo al personal artístico en producciones como las  de El pájaro de fuego y Doble corchea del coreógrafo Vicente Nebreda.

Su gran ilusión es realizar alguna pasantía en el Teatro Colón de Buenos Aires, ya que allí trabajan profesionales de gran trayectoria, o visitar Brasil, pues para ella, los carnavales representarían una gran fuente de aprendizaje para su carrera profesional.


Recibió el diploma de "Maestra Honoraria" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.



Ana María Kogén
Peluquera y Maquilladora
Nació en Caracas
08-11-1960

El  año centenario del Teatro Municipal de Caracas, 1981, significó para muchos técnicos una gran oportunidad para definir sus vocaciones, en profesiones estables, dignas de expresarse en todas sus potencialidades y en niveles profesionales ante el mundo del espectáculo. Tal fue la experiencia de Ana Kogén, quien participó en esta temporada gracias a la recomendación de su amiga Zenaida Carballo, quien le presenta a dos grandes vestuaristas de esa época, Roberto Spoladore y Adán Martínez Francia, quienes a su vez la animan para desarrollar actividades en peluquería y maquillaje, durante esa temporada y las siguientes. Es así como en 1983, acompañada de su gran amiga, Milagros Rodríguez, logra por méritos propios, su ingreso al Teatro Teresa Carreño al Departamento de Peluquería.

Sus estudios de bachiller y de Auxiliar de Contabilidad (Ince), así como sus trabajos en Pipeka, antiguo taller de sastrería y peluquería ubicado en Quinta Crespo, significaron un gran respaldo para ganarse el respeto de muchos artistas a quienes a atendido a lo largo de más de 30 años de labores. Su especialidad se concentró en la confección de sombreros, pelucas, barbas y bigotes, así como la de peinar, maquillar y realizar tocados de época.


Recuerda sus comienzos en el TTC, trabajando en espectáculos musicales como los de Evita y Jesucristo Super Star, y en óperas exigentes como Madama Butterfly, Turandot y Aida. Su trabajo en el maquillaje para “el viejito” de El cascanueces y las tantas caracterizaciones para Cayito Aponte, han sido momentos resaltantes en su carrera. Se desempeñó durante 10 años en la Ópera Breve realizada en el antiguo Ateneo de Caracas, participó en giras internacionales con el Ballet del Teatro Teresa Carreño, y recorrió casi toda Venezuela, compartiendo, como Técnico Estilista, con decenas de grupos de teatro, ópera, danza y ballet. Recibió el Premio Mérito al Trabajo en Danza en Primer Grado y numerosos reconocimientos y expresiones de agradecimiento por su trabajo profesional. Es amante de la música y del juego de las bolas criollas.

Recibió el diploma de "Maestra Honoraria" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Pedro José Molina “Picúa”
Líder en Herrería
Nació en La Azulita, Estado Mérida
14-12-66


Desde muy joven comenzó haciendo trabajos de carpintería. Antes de cumplir los 18 años, se inscribió en el Servicio Militar, y estando de servicio, en el Regimiento de la Guardia de Honor, cumple con algunas tareas que lo hacen acercarse al Teatro Teresa Carreño. Es allí, en 1989,  donde conoce al Jefe del Departamento de Herrería, el señor Tito Cadenas, quien lo invita a trabajar como herrero.

Su trabajo se nutre con el contacto con sus compañeros y con los numerosos escenógrafos que solo le expresaban una idea de sus proyectos, teniendo que él concretar en muchas oportunidades y a través de sus propios conocimientos, los planos definitivos para la construcción de las estructuras de hierro que soportarán las escenografías y al elenco artístico. El conocido escenógrafo Reyeros, significó en su momento, una gran escuela con la construcción de la gran escenografía para La traviata. Participa en una gira por el interior del país con el grupo Danzahoy y en muchos proyectos para numerosos grupos de teatro y eventos diversos.

Durante el período del profesor Azparren como Presidente del TTC (1995-1999), logra realizar varios cursos, en la especialidad de la Talla en Madera en el Ince, Aerografía, y Dibujo Artístico, con el maestro Antonio Galeandro.

Todo proyecto escenográfico, del Teatro Teresa Carreño, comienza en los Talleres de Herrería, pues para él,  la construcción de cualquier idea corpórea que conciba el diseñador, parte de allí. La profesión como herrero, especializada en la construcción de escenografías,  no se limita a la construcción de estructuras, sino que el trabajo debe entenderse como algo integral, es decir, el técnico debe complementarse e involucrarse con la obra, con los artistas, con el estilo y la época en la que está pensada, corregir medidas, hacer recomendaciones, pero además, se debe pensar en la operatividad de lo construido, lo cual debe ser fácil de armar y desarmar, así como de transportar y adaptar para otros espacios. Las estructuras o esqueletos, luego se entregan a otros departamentos, como los de carpintería, pintura y utilería. Al final, lo construido debe soportar el peso de los artistas, escaleras, paredes, puertas y ventanas deben ser absolutamente reales, pues por allí se desplazan una gran cantidad de actores, figurantes, coros y cantantes. Así define “Picúa” su trabajo.


Su contacto con las dos visitas del Papa realizadas en 1985 y en 1986, los eventos presidenciales e infinidad de espectáculos con artistas y técnicos, han representado para él, una gran experiencia humana. En el escenario, los cambios de escenografías, son funciones que debe cubrir y realizar con mucha experticia. Trabajó también como figurante en la ópera Cavalleria Rusticana y en el ballet Romeo y Julieta. Su tiempo libre lo dedica a la lectura, al dibujo y  escuchar música.


Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Pablo Marcial Escobar (Emerson)
Carpintero
Nació en la Parroquia de San Juan, en Caracas
30-06-1943


Estudió Mecánica Industrial, en la Escuela Técnica Industrial de la UCV. Realizó diversos y esporádicos trabajos como tornero mecánico y luego como carpintero, destacándose en el torno y en cortes de precisión. Más tarde se incorporó a una fábrica de cocinas como jefe del taller a mediados de los años 70 y realizó diversos trabajos en otras empresas. Finalmente, trabajó como Instructor de carpintería y ebanistería en el INCE durante varios años.

En el año 1989, el productor Alfredo Delgado, lo llama para que ingrese al Teatro Teresa Carreño en el Departamento de Utilería y Carpintería, con el objeto de reforzar al personal que trabajaría en las próximas temporadas de ópera y ballet. De inmediato, se destacó como carpintero-ebanista en las especialidades de la talla de madera, tornos, laqueados, molduras y tapicería.

La ópera Aída (del año 1992),  representó para él un arduo trabajo, y a la vez una etapa constructiva, ya que los diseños y trabajos eran tan exigentes, que se extendían hasta las madrugadas. Su responsabilidad en la elaboración de los elementos corpóreos, recibieron muchos elogios y comentarios halagadores que trascendieron hasta llegar a la prensa. Para esta oportunidad, el arquitecto y estilista Orlando Flores, quien trabajó en la estética y concepto general de esta ópera, significó un gran maestro a la hora de elaborar detalles y acabados finales para futuras escenografías, telones y utilerías.



Participó en varias giras nacionales e internacionales con el Ballet Teresa Carreño. Es amante de la música y se desenvuelve en sus ratos libres como percusionista del bongó y de las congas.



Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


José Castillo
Luminotécnico y Diseñador de Luces
Nació en Barquisimeto, Edo. Lara
09-03-1949

Se inicia como Técnico de Iluminación en el Teatro Municipal de Caracas, realizando montajes de luces para ópera, ballet, musicales, danza, zarzuela y obras de teatro. Realiza estudios de Técnicas Teatrales y Diseños de Iluminación, con Tony Tucci.

Fundateatros le encarga la dirección en el área de iluminación en los teatros Municipal y Nacional. Es solicitado con frecuencia por la empresa Mercateatros, filial de RCTV, para trabajar como jefe de iluminación en los teatros Los Cedros y La Campiña. Participa en giras con artistas nacionales e internacionales, e ilumina obras de teatro, comedias y musicales para la televisión.

Trabajó con el Nuevo Grupo, colaborando con los directores Enrique Porte, Armando Gota y Román Chalbaud, entre otros. En 1983 ingresó al Teatro Teresa Carreño como asistente al Jefe de la Unidad de Iluminación. Trabajó estrechamente con el maestro Vicente Nebreda, para quien diseñó la iluminación de los ballets Nuestros valses, Una danza para ti, Doble corchea, Percusión para seis hombres, Secuencias eléctricas, Romeo y Julieta, La cenicienta, El cascanueces, Tarde en la siesta, Pax de deux Spartaco y  Don Quijote. Luego realizando iluminaciones para  El amor brujo, Paquita, Las sílfides y Texturas, entre otros. En 2006 diseña la iluminación de Guaraira Repano.

Ha sido Jefe Técnico de Iluminación para las giras del Ballet Teresa Carreño en Norteamérica, Centroamérica, Suramérica y Europa y diseñó para el Ballet Metropolitano de Caracas en las producciones de los ballets El cascanueces, La bella durmiente y Giselle. También trabajó para el Ballet de Florida, USA.


En el género lírico en la Sala Ríos Reyna, son numerosas las óperas y conciertos iluminados. Trabajó para la Fundación Ópera de Oriente y realizó los diseños de El elixir del amor y Marina, para la Fundación Alfredo Sadel. Participó en los musicales producidos por el Festival de Música del Hatillo, Navidad entre amigos, El Cuarteto, Ensamble gurrufío, A barrio vivo y Gardel vivito y tangueando.

Fue nominado por cinco veces consecutivas al Premio Nacional Casa del Artista, haciéndose acreedor de dicho premio en tres oportunidades.


Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Luis Marcano Patiño
Líder de la Sección de Tramoya del TTC
Nació en Carúpano, Estado Sucre
04-02-1963

Es uno de los pocos técnicos que continúa en el Teatro Teresa Carreño que haya participado  como carpintero en la construcción del piso final del escenario de la Sala Ríos Reyna. Al inaugurarse el Complejo Cultural Teresa Carreño, ingresó al personal del Teatro como técnico en tramoya en 1983. A partir de ese momento y con la construcción de la escenografía de la primera ópera realizada en el Teatro, Italiana en Argel, comienza una carrera que no tendrá interrupciones hasta el día de hoy, cumpliendo más de  30 años de labores en esta área.

Participó en varias giras por el interior del país y en todas las giras internacionales de Ballet Teresa Carreño desde el año 1996, trabajando como Jefe Técnico de Escenario. Los dispositivos escenográficos realizados en ballets, como el de  El cascanueces y Romeo y Julieta, de Vicente Nebreda, así como las óperas El trovador (1983), del escenógrafo Eduardo Mancera, y Barbero de Sevilla (1985), de Sixto Masieu,  han representado grandes aprendizajes para su carrera profesional.

Los grandes musicales, tales como Evita, Jesucristo Super Star, espectáculos como los de El Premio Ronda, Mis Venezuela, Les Luthiers, Rafael y Paloma San Basilio, el Ballet de Washington, Ballet de Londres, y todos los festivales internacionales de teatro presentados en las diferentes salas del país, han despertado su interés por superarse a la hora de realizar los dispositivos para eventos.


Se ha especializado en la construcción de conchas acústicas para grandes orquestas, y trabajó durante 7 años en la realización consecutiva de la cámara acústica utilizada para los eventos del Festival Internacional del Hatillo. Ha trabajado en cientos de montajes en todos los teatros de Caracas y en los más importantes del interior del país, tales como el Teatro Juárez de Barquisimeto, Lía Bermúdez en Maracaibo, Andrés Bello en San Felipe, Baralt de Maracaibo y Teatro Municipal de Valencia, entre otros.

Recibió el diploma de "Maestro Honorario" por parte de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE) en diciembre de 2012.


Investigación y redacción: Asdrúbal Urdaneta.
Montaje: Jesús Eloy Gutiérrez.
Fotografías: Johathan Contreras y Colección Fotográfica/ Centro Documental Teatro Teresa Carreño.

domingo, 17 de noviembre de 2013

Testimonio del maestro Rodolfo Rodríguez


Entrevista realizada por Carmen Sequera al maestro Rodolfo Rodríguez, vía correo electrónico entre abril y octubre de 2011.



Carmen SequeraMaestro Rodolfo Rodríguez,  reciba mi manifestación de cariño, extensivo a la Sra. Mercedes y  deseando se encuentren muy bien.
Le cuento que he estado tratando de ubicarlo y gracias a Miguel Cabrera, a quien como a usted quiero mucho, nos ha acercado.
El objetivo, además de alegrarme sobremanera el estar escribiéndole, se debe a que haremos una muestra gráfica y audiovisual del Ballet Teresa Carreño, durante la Temporada de Danza a efectuarse en mayo de este año, en el marco del aniversario del Teatro. Quisiéramos poder hacerle  una  entrevista vía Internet sobre los comienzos del Ballet Teresa Carreño, usted es una de las personas con relevancia en el  inicio de nuestra Compañía como fundador y primer Director Artístico de la misma, estaremos  honrando su participación en la vida de la misma. 

Agradecería Maestro, me respondiera con tiempo esta misiva para confirmar el contacto, yo le enviaría posteriormente luego de su respuesta, por este correo, las preguntas para la entrevista escrita; también necesitaría una foto suya, ya que la que tengo es la del primer programa de Giselle y de El lago de los cisnes, le envío las imágenes.
Querido Maestro Rodolfo, quedo a la espera de su respuesta, reciba un abrazo y mi aprecio.

Rodolfo Rodríguez: Carmen....para mí siempre serás Carmencita.   Aunque pasen los siglos, es una satisfacción de recuerdos gratos.  Revivirlos con este re-encuentro, Mercedita y yo estamos bien, gracias a Dios y dispuestos a colaborar con Uds.  Mándanos por e-mail lo que necesitan que le contestemos y lo haremos a la brevedad posible.
 Deseamos estés bien.  Mandamos un saludo a quienes tú creas lo puedan recibir.
Dos besos de Mercy y mío.
Chau!

CS: Hola Sra. Mercedes! estamos atentos, en cuándo ustedes nos avisen. 

Sepan que estoy feliz y complacida de haberlos encontrado, nunca los olvidé. El maestro Rodolfo, al seleccionarme en aquella audición en la escuela de Ballet en Valencia dio inicio a una etapa muy importante en mi vida,  mil gracias a los dos.  
Le cuento Mercy,  necesitamos si fuera posible, no deseo preocuparlos, unas fotos del maestro Rodolfo de la etapa de inicio, la única que tenemos es la impresa en los programas de Giselle y El lago, la imagen pierde mucho al escanearla ya que es de imprenta, si conservan la original de esos programas u otra solo, y  una o dos de esa época con bailarines de la Compañía o los invitados para esos ballets, en ensayos o cualquier otro momento cuando estaban en Caracas. 

Reciban mi cariño      
besos
Carmencita

RR: Carmencita, relatar los comienzos es largo. Yo te lo voy  enviando uno detrás de otro por e-mail

Representa un gran honor que me contactaras  para contarles mi testimonio de la fundación del "ballet estable". Me da mucha nostalgia y gran responsabilidad. Esta es mi versión: ‘tengo setenta y ocho años de "respiración",  60 de "Amor y pas de bouree" y una fe inquebrantable en Dios,  no es momento de equivocarme o mentir.

Volaba Buenos Aires-Caracas. En pleno vuelo se me presenta un señor y me pregunta: ‘¿Ud. es Rodolfo Rodríguez?’ Si,  Ud. no me conoce, pero yo sé quien es Ud. ¿Va de paso a Venezuela?, no, yo vivo allí.  Mire me dice: ‘soy Miguel Ángel Veltri, Director de la Ópera Metropolitana, OMAC, estamos organizando la temporada de ópera para 1976. Me estoy volviendo loco porque no consigo un coreógrafo de categoría  que conozca la obra "La Traviata". Soy hijo de un cantante del coro del Teatro Colón y lo vi a Ud. muchas veces bailarla, ¿Le interesaría montar la coreografía para nosotros?  ("anuncio de sentarse para aterrizar") me da una tarjeta y me dice: ‘yo estaré tres días en Caracas, llámeme cuando quiera’.  Lo llamo y le digo que  me interesa la posibilidad de colaborar con ellos.
Todo fue bien en la temporada 1976.  Mi versión coreográfica gustó y firmé contrato con la OMAC para la temporada 1977. En esa época existían dos fundaciones que competían por las temporadas de ópera, la OMAC y la Fundación Teresa Carreño. El señor Berry, actor, que colaboraba con La FTC y me conocía, me hizo llegar una invitación  formal del Doctor Salvador Itriago, para conocer  las obras en construcción del teatro y conocernos personalmente. La reunión terminó muy agradable, con una oferta de la FTC para que yo fuera el asesor de la junta directiva de todo lo relacionado con la danza, era un trabajo y lo acepté.  A los pocos días me enteré de que la FTC tenía un coro de voces permanente que ensayaba todo el año.  Esta buena noticia me dio la moral necesaria para pedirle al Doctor Itriago una reunión formal para plantearles el proyecto de la conformación del cuerpo estable de ballet del Teatro, me preguntó si podían estar presentes otros directivos y  le dije, cuantos más, mejor.

En la reunión, caminando todos los asistentes por la obra en construcción del Teatro, me dio mucho entusiasmo ver mucha gente trabajando. Les comenté: ‘crecí entre América, Asia, Europa, actuando en teatros de la importancia y categoría, esas son las ideas que pretendemos darle a nuestro teatro de la FTC. Las bases sólidas de esos teatros son sus cuerpos artísticos, orquesta sinfónica, coro de ópera y cuerpo de baile.  En un teatro todo es importante, acomodadores, electricistas, modistos, peluqueros, etc. etc.  Pero los que dan el estilo y mantienen el repertorio  para que cada vez se abra el telón de ese Teatro, son sus cuerpos artísticos. 

El edificio del teatro meses más o menos se terminaba. Los cuerpos artísticos no se pueden crear en días,  entonces les propuse, con toda responsabilidad, comenzar a crear un cuerpo de baile que supla las necesidades en la temporada de ópera y presentar funciones de ballet  con primeras figuras  invitadas...  (murmullos entre los presentes) y se alza  una voz que dice "aquí en Caracas no hay bailarines".  Yo les propongo, no es un deseo, es una idea estudiada y meditada, les pido tomen esta propuesta con toda la seriedad del caso. Cuando Uds. lo deseen, en reunión completamente  formal  estoy dispuesto a contestar preguntas y explicar el modo de llevar adelante este proyecto.

El Doctor Itriago y el señor Eduardo Feo Casas demostraron cierto interés. Me citaron más rápido de lo que esperaba. Les expliqué  el sentimiento de la propuesta. Posterior a esto en reunión muy formal conseguí que hablaran nada más que dos a la vez", un verdadero record, no se asusten los cafecitos llegaron como debe ser.  Les aclaré lo que pensé les preocupaba. En Caracas hay muchas academias de ballet, estas escuelas llevan muchos años funcionando con criterio comercial pero con buen resultado.  El ballet clásico es admirado en el mundo, por eso casi todas las ciudades cuentan con su propio teatro para ópera y ballet.  Entre nuestra juventud interesa y gusta ese estilo de baile, muchos bailarines que actúan en TV, y  en clubs nocturnos, tienen técnica clásica.  A los que dudan les aseguro que abriendo esta posibilidad, sería preparar el camino y futuro específico al "Ballet estable de la FTC, podemos comenzar de inmediato para crear la base de la meta. 

Como todo comienzo serio para el futuro, hay que tomarlo con calma pero comprobando adelantos en poco tiempo. 

Dentro de cuatro meses comienza la temporada de ópera de la FTC, sería una buena oportunidad para suplir la necesidad coreográfica de algunas óperas y comprobar si estamos en el camino correcto. Yo conozco a fondo el ambiente del ballet en Caracas porque colaboré con muchas escuelas y fui coreógrafo en TV. Convocar para una audición sería relativamente bien recibido,  pero mi deseo es darle oportunidad a todas las escuelas y bailarines de Venezuela porque vamos a fundar el ballet para el teatro más importante de Venezuela,  por eso estoy preparado para ir al lugar necesario en todo el país a tomar audiciones. No voy a seguir ampliando mi proyecto, los problemas los iremos solucionando en el camino.

Conozco las necesidades coreográficas de las óperas y los ballets clásicos de repertorio internacional,  me comprometo a organizar las audiciones y con los resultados de los bailarines elegidos por un jurado crear el ballet de la FTC, no es tarea fácil, pero me siento  capacitado por mi trayectoria y experiencia para organizar y hacerme cargo de toda la parte  artística. Entendieron la necesidad de crear el ballet para la FTC  y que las condiciones para hacerlo eran propicias. Luego de plantearles esta "necesidad proyecto" me retiré, para que discutieran y tomaran una decisión. Esa misma noche me llamaron por teléfono a mi casa dándome la noticia  de que fue aprobado el proyecto.

El Doctor Itriago se reunió posteriormente conmigo y me dijo, Rodolfo te felicito tu proyecto fue aprobado,  nos quedan muchas preguntas pero todos estamos de acuerdo en apoyar y comenzar, cuenta con todo nuestro respaldo. Esto  me dio mucha alegría y un gran sentimiento de responsabilidad, todos tendremos que trabajar duro para que este cuerpo artístico esté a la altura de las necesidades del Teatro de la FTC.

No tardó en salir  la frase famosa "el presupuesto no es grande", contando con esa realidad voy a organizar todo el sistema de funcionamiento sin ningún gasto burocrático.  Toda la necesidad administrativa será absorbida por el presupuesto existente que funciona para la FTC. El cuerpo de baile sería con los artistas estables y si fuera necesario otros contratados.  Les pido comenzar ya. El doctor Itriago me dijo que contara con las puertas abiertas de su oficina.  Cuento con eso para comunicarme y que Uds. estén enterados, esta es una creación y obligación de todos.  Me lancé entonces a la calle para conseguir  bailarines, hablar a la prensa del proyecto y dar información para la fecha de la audición, se requería de bailarines con técnica avanzada.

Tendrían que ser aprobados por una junta médica y luego por el jurado de audición.  La convocatoria tuvo mucha expectativa y una gran cantidad de aspirantes que nos obligó a tener tres audiciones para poder calificarlos a todos.  Se llenaron todos los requisitos y fue aprobado por el jurado un grupo de alumnas con todas las condiciones para convertirse con la ayuda de la FTC en bailarinas estables de nuestro teatro.

Así fue  también con la promesa que me  hice de buscar bailarines a nivel nacional, cuando me enteré que en el Estado Carabobo existía una academia con muchos años funcionando, fuimos a Valencia. Hablé por teléfono con su directora, la maestra Nina Nikanoróva,  manifestándole mi interés en conocerlos y explicarles a sus alumnos la convocatoria de la FTC, además ver una clase de los alumnos avanzados y profesores,  me agradeció el interés y nos pusimos de acuerdo para la fecha.  Su directora montó una clase apropiada para mostrar lo serio y bueno de sus alumnos, muy distinta a las clases de las escuelas comerciales, lo que me dio mucho entusiasmo, los felicité por el estilo, técnica y seriedad que aplicaban para sus clases y en especial a su directora.

Vuelvo a Caracas ya con una realidad sólida,  con los 27 bailarines  aceptados y algunos pocos contratados, se podía pensar en una fecha razonable para nuestro debut.   Provenían de:
Ballet del Estado Carabobo, Escuela de Lydia Franklin, Ateneo de Caracas, Ballet Clásico Venezolano de Nina Novak, Academia Pleyel, Academia Vivian Tobio.

Con muchos objetivos ya resueltos, planteo a la directiva de la FTC  el resultado que ellos ya conocían por la participación directa de su director y ahora la posibilidad real de presentar nuestra primera función con el ballet "Giselle", El Doctor Itriago me dice medio extrañado, "la idea es buena, pero Giselle no es una obra muy difícil?  Le respondo que no es más difícil que "La Traviata" y la hicimos.  Nosotros lo podemos hacer con la calidad artística requerida y las primeras figuras invitadas.  "Giselle" es uno de los ballets clásicos más conocidos,  tanto el argumento como la coreografía están montados alrededor de los personajes principales.  La historia hay que contarla con una mímica muy de la época en el primer acto,  con un estilo muy irreal y limpio los bailes del segundo acto.  No es fácil pero lo podemos hacer, yo me comprometo a poner a funcionar toda la obra coreográficamente y de contactar  a las primeras figuras mundiales para que colaboren bailando con nosotros.  Todo lo administrativo y burocrático igual que el principio, el Doctor Itriago  me repitió: “Rodolfo comienza ya y todo lo que necesites me lo pides”.

Estaba contento pero preocupado. Mi señora Mercedes me pregunta.... cuando termino de contarle me dice, puedes contar conmigo para lo que sea. Su propuesta era buena, sentí un gran apoyo de su parte, pues ella era bailarina clásica, estudió en muy buenas escuelas bajo la dirección de excelentes maestros. Con Alicia Alonso bailó como cuerpo de baile y en solos de un vasto repertorio de los clásicos.

Me apoyaría entonces dando las clases a la futura compañía y tomando los ensayos, además domina perfectamente el  inglés, lo que era muy importante para comunicarnos con los artistas invitados.  Al plantearle todo esto al Presidente del Teatro Doctor Itriago, me dijo, ‘bueno la Sra. Mercedes puede ser tu asistente ayudándote mucho, pues estás solo con la parte artística’.

Ya teníamos el cuerpo de baile, de allí partimos entonces a buscar todo lo faltante para la realización del ballet “Giselle”. Ya con el salón para clases y ensayos, organizamos los horarios,  comenzando estos en el PH del edificio San Martín en Parque Central y una sala del viejo edificio del Ateneo.  Lo que si me costó mucho trabajo desde el primer día y por mucho rato fue lograr una disciplina y unificación razonable en el conjunto, claro está, diferentes escuelas y edades, pero al final se logró.

Paralelamente trabajábamos en los diseños del vestuario, decorado escenográfico, pelucas, zapatos, utilería, para esto tuvimos el apoyo del personal técnico del Teatro Municipal, costureras y sastres de la OMAC, búsqueda de la música copiar partituras, la Orquesta, contactar a las primeras figuras; para el momento, conseguimos la disponibilidad de Fernando Bujones y Verónica Tennant.

Se presentaron mil situaciones hasta el día de la función, pero sabíamos lo que queríamos y cómo hacerlo, ayudándonos entre todos y con amor en la creación de este cuerpo de ballet, con toda responsabilidad cumplimos con nuestro deseo y compromiso.

Actuamos también en las Óperas: El Trovador, Ballo in Maschera, Fausto, La Traviata, La Favorita, Rigoletto y Carmen.

Creamos para la Compañía los Ballets: Giselle, El lago de los Cisnes - Cuatro actos, y El Espectro de la Rosa, El Príncipe Igor.
Al final de este tiempo se abría un futuro para la compañía recién creada, sucedieron situaciones muy buenas y otras… además de  muchas anécdotas que les voy a deber, eso porque caería en el riesgo de parecer un "chismerólogo" en vez de alguien que vivió esa interesante época y la relata.

Sin duda todo ese gran equipo trabajó fuertemente para la creación del Ballet de la Fundación Teresa Carreño. Me tocó ser su Director Artístico, pero absolutamente todos fuimos los responsables de poder crearlo con éxito para que continuara y funcionó.

Estoy muy orgulloso de ustedes, artistas del primer grupo y de los que han ido integrando a través del tiempo el "Ballet" de uno de los teatros más importantes de Latinoamérica, así como de los éxitos mundiales que ha alcanzado la Compañía, y a los bailarines y bailarinas actuales y a los futuros les digo: “Háganlo con amor y respeto, no le deben nada a nadie, aporten su arte y dejen su huella para que la obra continúe”.
Carmencita, contéstame si recibiste los e-mails o si te falta alguno. Tendrás que acomodarlo a lo que necesites. 

Cariños, Rodolfo y Mercy.



Rodolfo Rodríguez

Inició su carrera artística en el Teatro Colón de Buenos Aires como figura principal. En dicho teatro, durante una década, bailó el repertorio clásico completo y trabajó con los coreógrafos Balanchine, Lifar Massine, Lichine y Tudor. En 1960 es contratado por el Ballet Nacional de Cuba y desde entonces realizó giras a Rusia, Inglaterra, China, India y Francia. Se radicó en Venezuela en 1971 y colaboró con todos los ballet de Caracas. Poco más tarde, su vinculación a la Fundación Teresa Carreño desde 1975, le permite ser nombrado director del Cuerpo de Baile, con la responsabilidad de formar y prepararlo para su debut, que ocurrió con la presentación de Giselle, teniendo a Fernando Bujones y a Verónica Tennant como artistas invitados.

Carmen Sequera

Ex bailarina del Ballet Teresa Carreño. Se inició en el estudio de la danza clásica a los ocho años, bajo la dirección de la maestra Nina Nikanórova. Egresó de la escuela de ballet como bailarina y profesora de ballet; asistió al séptimo Festival Internacional de Ballet en Varna-Bulgaria (1974). También recibió clases de los maestros: Nina Nikanoróva, Eric Volodín, Olga Kosnstrisky, Ninel Yultieva, José Parés, Julio Lámas, Juan Juliano, Rodolfo Rodríguez, Rubén Echeverría, Irina Ivanova, Rafael Portillo, entre otros. En agosto del año 79, fue seleccionada junto a un grupo de doce bailarines, por las autoridades de la Fundación Teresa Carreño, bajo la dirección del maestro Rodolfo Rodríguez, para formar el cuerpo estable de ballet del Teatro Teresa Carreño, con el cual bailó años. En esa época, compartió escenarios con figuras como: Rudolf Nureyev, Fernando Bujones, Verónica Tennant, Ekaterina Maximota, Vladimir Vasiliev, Yoko Ichino, Yoko Morichita, Dominique Kalfouni, Peter Breuer, Julio Bocca, Eleonora Cassano entre otros.


Fotografías: Paco Alonso, "Archivo Personal Carmen Sequera" y Colección Fotográfica del Centro Documental/ Prensa: Colección Hermorgráfica del Centro Documental.